Aún queda por demostrar si Charlie Kaufman tendrá el mismo éxito rotundo en Hollywood como director que como guionista.

Su autolistón está alto porque los guiones de ‘Cómo ser John Malkovich’, ‘Adaptation. El ladrón de las orquídeas’ y ‘¡Olvídate de mí!’, son de los que poco se ven en la Meca del Celuloide. Por el último ganó el único Oscar al que le da brillo en su casa, el de mejor script en 2005.

Aunque esas mismas películas le han dado a Kaufman su trío de Baftas a mejor guión de las ediciones de 2000, 2003 y 2005. Vamos, un crack en esto de inventarse historias que interesan y que no están remanidas.

También es suyo el script de ‘Synecdoche, New York’, largometraje de su ópera prima como director, pero mejor olvidarse de ella porque aquello fue una pájara.

Ahora va al contraataque como realizador y lo hace a lo grande y tirando de...